Cuando una empresa necesita contratar nuevos empleados establece una serie de requisitos que deben tener los candidatos para poder ocupar un puesto en la compañía. Es claro que quien se encarga de este proceso lleva sobre su espalda la carga de una gran responsabilidad. Elegir al empleado idóneo no es tarea fácil y menos en un mercado laboral tan competitivo como el actual.
Pero como todo, el mercado laboral también ha experimentado transformaciones y su dinámica ya no es la misma que hace 30 años atrás. La inclinación ahora es más hacia una visión innovadora y flexible que al viejo requerimiento de la experiencia. Los empleadores han descubierto que existen un conjunto de habilidades que van a ayudar a la empresa a ser mucho más productiva que la acumulación de años de experiencia y una formación académica interminable.
A fin de cuentas, la idea es contratar personal que ayude a generar más dinero o en su defecto a ahorrar gastos. Por ello un empleado con vasta experiencia muchas veces suele ser una persona con altos estándares que exige ciertas condiciones a la empresa y a su vez un alto salario. Pueden ser también poco flexibles o adaptables.
En cambio los jóvenes hoy en día suelen tener una actitud mucho más abierta, con expectativas salariales menos altas y con una mente fresca. Están llenos de ideas creativas y novedosas que al final del día es lo que más se está valorando en las empresas actualmente.
El mercado laboral en Latinoamérica
Las empresas en América Latina particularmente están teniendo dificultades para conseguir personal cualificado. La situación económica en estos países obliga a los jóvenes a abandonar sus estudios y comenzar a trabajar. Pero estos jóvenes siguen teniendo un potencial que muchas empresas consideran valioso. El manejo de habilidades está siendo mucho más provechoso para las organizaciones que una formación completa y una gran experiencia.
Es cierto que el conocimiento técnico y teórico es vital para llevar a cabo las actividades propias de cada puesto de trabajo. Pero las empresas se han percatado de que esos conocimientos pueden perfeccionarse con cursos y capacitaciones. Lo que si no es tan fácil de lograr es un personal con las llamadas habilidades blandas.
Se trata de personas que pueden resolver problemas de forma rápida y efectiva, con buena actitud, con una mente creativa e innovadora. Y sobre todo con un sinfín de atributos y destrezas que tienen que ver más con la personalidad que con el conocimiento como tal.
Pero las pocas plazas de empleo son un problema constante en Latinoamérica. Y si lo comparas con la cantidad de jóvenes llenos de ideas innovadoras y ansiosos por obtener estas anheladas plazas, podrás darte cuenta que te encuentras ante un mercado difícil de entrar. En este sentido, hay países de la región en donde esta tarea se complica más. No es el caso de Bolivia.
Buscar trabajo en Bolivia pareciera no ser tan complicado dado que es el país con la tasa de desempleo más baja de la región (4,5% según el mismo presidente Evo Morales). No obstante, debes considerar que como tú, hay cientos de personas tratando de encontrar el empleo ideal con buenos ingresos.
Las claves para ser un candidato ideal para tu empleador
De modo que si estás en busca de empleo y quieres ser el candidato ideal para cualquier empresa, independientemente de tus conocimientos, debes identificar tus habilidades y trabajar en ellas. Solo así lograrás destacarte y demostrar que tu aporte en la empresa irá mucho más allá de ser un simple colaborador. Aportarás un valor intangible que tu empleador sin duda considerará a la hora de elegirte.
Si tu plan es buscar un trabajo en Bolivia, aunque esto será válido para otros países, es importante que sepas cuáles son las destrezas más valoradas.
1.- Ser abierto y comunicativo
Una persona de conversación fluida siempre será mucho más fácil de llevar y a su vez asegura a la empresa de que será capaz de resolver los conflictos de forma rápida y asertiva. La empatía, en especial en momentos álgidos de la empresa, es muy valorada en un trabajador.
2.- Poseer iniciativa
La capacidad de anticiparse a las necesidades de la empresa es sin duda un valor apreciable. Demuestra que tiene la confianza y la seguridad suficiente en sí mismo para asumir nuevos retos sin que sus superiores le exijan tal tarea.
3.- Ser creativo
Si tu empleador nota que eres hábil generando soluciones a los problemas de la empresa y que además, tienes la capacidad de mejorar procesos y crear proyectos que mejoren o aumenten su rentabilidad, serás un candidato con altas posibilidades de ser elegido.
4.- Capacidad de trabajo en equipo
Si un empleado no es capaz de oír a los demás miembros de su departamento o de la empresa en general y a su vez no está dispuesto a colaborar con ellos, es muy difícil que pueda aportar algún valor a la empresa. Serás descartado en la entrevista si no demuestras un espíritu integrador.
5.- Ser flexible/adaptable
En un mundo en el que los cambios son tan constantes no puedes quedarte atrás. Debes ser capaz de adaptarte a distintas situaciones, tareas y hasta puestos de trabajo. Por eso es importante que manifiestes en tu entrevista si te ha tocado vivir en el extranjero, si tienes conocimientos de otros idiomas o si estuviste un empleo en donde lograste adaptarte a diferentes situaciones dentro de la empresa.
6.- Actitud positiva
Serás un candidato a considerar si tu actitud es entusiasta y positiva. Por ello evita hablar de cualquier tema que sea negativo. Si tuviste una mala experiencia en trabajos anteriores, no hables de ello. Más bien enfócate en las buenas experiencias y evita las críticas.
7.- Ser curioso
Se trata sobre todo de un rasgo de la personalidad y no una destreza. Sin embargo, es algo que debes desarrollar y demostrar si quieres ser de los candidatos más deseables para la plaza laboral a la que te postulas. Te apreciarán más si posees una mente abierta, dispuesta a salir de tu zona de confort, con deseos de indagar, aprender y dominar nuevos temas y competencias.
8.- Ser ambicioso
Es importante que demuestres cuáles son tus motivaciones personales y tus planes a futuro. Al manifestar tus metas y objetivos a alcanzar tu posible empleador sabrá que contará con un trabajador dispuesto a avanzar y como consecuencia la empresa lo hará con él.
Si tomas en cuenta estos aspectos y los pones en práctica, será más fácil que consigas el puesto de trabajo que estás buscando.